diumenge, 8 de març del 2009

Crònica del Let's Festival 2009




El extrarradio barcelonés despidió, el primer fin de semana de Marzo, a los más de 20 artistas que, desde el pasado Febrero, desfilaron por el Hospitalet. Hubo propuestas emergentes sorprendentes, bandas que volvieron tras tiempo en paro, y otras que se consolidaron. Bajo esas premisas se vertebró la estructura del festival, que ayudó a los organizadores a dividir los dos días según dos grandes nombres. Los de Manel, y Love of Lesbian. Ambos, caracterizados por conseguir movilizar la masa Indie que se desplazó hasta el Salamandra. El primer día, sirvió para colocar los grupos de habla catalana. Le Petit Ramón, consolidado como una de las propuestas más interesantes de la música que toma el relevo a la psicodélia de antaño, abrió el festival. Se presentó con Experimenta 3, su formato habitual. Gamberro como siempre, cumplió por todo lo alto, repasando repertorio antiguo con temas de lo que será su próximo álbum. Tras ellos, el público, agradecido, estalló a gritos cuando se levantó el telón que descubría a Manel. Guillem Gisbert y los suyos, interpretaron, de forma excelente y multitud de detalles, cada uno de los temas de ‘Els Millors Professors Europeus’, contextualizados con intros que rozaban el minuto y medio. Tras ellos, y cuando el reloj marcaba las once pasadas, subió al escenario Julio de la Rosa y con él, acompañantes de la talla de Abraham Boba (acordeón y teclado). Interpretaron, en prime time, ‘El Espectador’, un trabajo que delata virtudes de música de cámara. El final de la noche tuvo un nombre, el de los navarrenses, El Columpio Asesino, que antes de dejar al público con los dj’s, llenaron las paredes del Salamandra de ritmos electronico-rockeros, llevándose al público, completamente, al bolsillo
La resaca del día siguiente se hizo mucho menos pesada gracias al concierto de Los Punsetes. Para un servidor, uno de los mejores del festival. El pop ruidoso vuelve a tomar sentido. Con una afinidad palpable a lo que años atrás fueron el Inquilino Comunista y, después, Triangulo de Amor Bizarro, Los Punsetes pusieron el listón del ruido muy alto, y además, con actitud. Con algo menos de ruido, pero más de simpatía escénica, Charades, tocaron, sin pena ni gloria, temas de su discografía habitual. Lo que pasó tras la actuación de Charades fue una auténtica sorpresa. Los que apuntaban las críticas de la prensa se hizo evidente en directo. Souvenir han abandonado por completo el sonido pop afrancesado de la escuela de Les Tres Bien Ensemble, para convertirse a la religión de la sintetización. Souvenir suenan ahora mucho más enlatados y recuerdan a la música de grupos como Ladytron o Yelle, sobretodo a esta última por lo del francés. Por fin, a las doce pasadas, el escenario del Salamandra, acogió a los responsables del Sold Out de aquel día. Love Of Lesbian demostraron lo que todo el mundo sabe, que son un grupo de pop de masas, y que los vestigios de Maniobras de Escapismo aun siguen seduciendo a sus fans. Los de Santi Balmes, centraron su repertorio en el concepto del 33’3%, un tercio del tiempo para cada disco. Presentando, en exclusiva, canciones de su inminente álbum, 1999, que aún no se escuchan en su myspace. Tras los lesbianos aun había una sorpresa, el misterioso nombre de Oscar Tienealas, proyecto de un joven canario que, con una filosofía aparatosamente electrónica, presentó en vivo y directo, un espectáculo que combinaba, a partes iguales, show escénico –lo de ‘tienealas’ viene de los brincos que pega el colega- y música gamberra. Con él, nos despedimos del extrarradio. Deseando que vuelva a ser el año que viene y enamorarnos de las glorias de este pequeño gran festival. Arnau Sabaté




(Crònica per Mondo Sonoro)